La filosofía tolteca sobre el ser humano y la sociedad se basaba en la búsqueda de la sabiduría y el autoconocimiento, con un fuerte énfasis en la responsabilidad personal y la disciplina. Aunque no dejaron textos escritos extensos, su legado se transmite a través de mitos, leyendas y prácticas espirituales que influyeron en culturas posteriores como la azteca.
El ser humano:
- Dualidad: Los toltecas creían que el ser humano estaba compuesto por dos entidades: el tonal, la parte racional y consciente, y el nagual, la parte misteriosa e inconsciente. El objetivo era equilibrar estas dos fuerzas para alcanzar la plenitud.
- Responsabilidad: Cada individuo era responsable de sus acciones y decisiones. La libertad personal era valorada, pero también se enfatizaba la importancia de actuar con integridad y respeto hacia los demás.
- Disciplina: El camino hacia la sabiduría requería disciplina y esfuerzo. Los toltecas practicaban diversas técnicas de autoconocimiento, como la meditación, el sueño consciente y la observación de la naturaleza, para superar sus limitaciones y alcanzar un estado de conciencia superior.
La sociedad:
- Orden y armonía: La sociedad tolteca se organizaba en torno a la idea de mantener el equilibrio y la armonía en todos los aspectos de la vida. Se valoraba el respeto a las jerarquías y las tradiciones, así como la cooperación y la solidaridad entre los miembros de la comunidad.
- Guerreros espirituales: Los toltecas consideraban que los verdaderos guerreros no eran aquellos que luchaban en batallas, sino aquellos que luchaban contra sus propios miedos y debilidades internas. La valentía y la determinación eran cualidades admiradas, pero siempre en el contexto de la búsqueda de la sabiduría y el crecimiento personal.
- Conocimiento y aprendizaje: La educación y el aprendizaje eran fundamentales en la sociedad tolteca. Se transmitían conocimientos sobre astronomía, matemáticas, agricultura, arte y espiritualidad, con el objetivo de formar individuos completos y capaces de contribuir al bienestar de la comunidad.
Legado:
Aunque la civilización tolteca desapareció hace siglos, su filosofía sigue siendo relevante en la actualidad. Sus enseñanzas sobre la importancia del autoconocimiento, la responsabilidad personal y la búsqueda de la verdad interior resuenan con muchas personas que buscan un sentido más profundo en sus vidas. La filosofía tolteca nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con nosotros mismos, con los demás y con el mundo que nos rodea, y a esforzarnos por vivir de manera más consciente y armoniosa.
Algunas ideas clave de la filosofía tolteca:
- “Sé impecable con tus palabras”: Habla con integridad y verdad, evitando el chisme y la crítica destructiva.
- “No te tomes nada personalmente”: Lo que otros dicen o hacen es un reflejo de su propia realidad, no de la tuya.
- “No hagas suposiciones”: Comunícate claramente para evitar malentendidos y conflictos.
- “Haz siempre tu máximo esfuerzo”: Da lo mejor de ti en cada momento, sin juzgarte ni compararte con los demás.
Estas enseñanzas, aunque simples en apariencia, encierran una profunda sabiduría que puede ayudarnos a vivir una vida más plena y significativa.
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